2018_10_04. “Al mal tiempo, mejor cara”. BÁRBARA CONSTANTINE. Editorial Seix Barral. 2013. 285 páginas.
BIOGRAFÍA:
Barbara Constantine es una
escritora, guionista y ceramista francesa, nacida en 1955 en Niza. Actualmente vive en París.
Principales publicaciones:
·
Enciende
el gato, 2007.
·
A Melie, sin melodía , 2008.
·
Tom, Little Tom, 2010.
·
Vecinos, vecinos y Jules el gato, 2011.
·
Y luego,
Paulette ... 2012.
·
Retratos
pequeños de personas muy grandes, 2017.
RESUMEN:
Ferdinand vive solo en una
granja y, francamente, no es feliz. Sólo las visitas esporádicas de sus nietos
consiguen arrancarle una sonrisa.
Un día, después de una fuerte
tormenta, descubre que el techo de su vecina Marceline se ha venido abajo. Y la
mujer no tiene donde ir. Decide entonces acogerla en su casa.
Poco a poco, como por arte de
magia, la granja se va llenando de gente: un amigo de la infancia que ha
quedado viudo, dos hermanas a quien su sobrino ha echado de casa, y una
estudiante de enfermería, Muriel, que con su juventud y vitalidad dará un nuevo
soplo de vida a este grupo de ancianos que redescubren juntos la felicidad.
Al mal tiempo, mejor cara nos
muestra cómo tejer lazos inesperados entre aquellos que, con la edad, se
necesitan mutuamente.
PUNTUACIÓN
DE LOS LECTORES:
7’25
PERSONAJES;
Ferdinand: Abuelo solitario.
Marceline: Abuela vendedora de miel y
fruta.
Masmalo: Gatito.
Velcro: Perro de Ferdinand que murió.
Berthe: Perra de Marceline.
Cornelius: Burro de Marceline.
Roland: Hijo de Ferdinand.
Lionel: Hijo mayor de Ferdinand.
Ludovic: Nieto de Ferndinand.
Lucien: Nieto de Ferndinand.
Mireille: Nuera de Ferdinand.
Guy: Amigo de Ferdinand. Tío de
Mireille.
|
Gaby: Amiga de Ferdinand. Tía de
Mireille.
Henriette: Esposa de Ferdinand.
Hermanas Lumiere: Simone y Hortense.
Sobrino de Hortense: quiere
vender la casa.
Gerard: Médico.
Olenka: Hija de Marceline.
Danuta: Hija de Marceline.
Muriel: Camarera de Mireille.
Louise: Camarera de Mireille.
Kim: Camarero.
Adrien: Camarero.
|
ESTILO:
Gran parte de la narración está
en presente de indicativo. Hay otras que está en pasado.
Lenguaje muy coloquial, sin complicaciones.
ANÁLISIS:
Una novela entrañable, humana y optimista.
Cuando estás leyendo el libro lo
ves muy banal pero al final, haciendo una visión global, aprecias todo lo que
trabaja: la bondad, la generosidad, la ayuda mutua, la soledad de los ancianos
(y de las personas en general) la convivencia, el altruismo, la ternura, el optimismo,
las relaciones padres-hijos-nietos-abuelos…
Los personajes son buenos,
generosos, tolerantes, perdonan, comprenden, se ayudan, se llevan bien y se
toleran.
Hemos hablado de las residencias
y de la asistencia domiciliaria. De la soledad.
La diferencia en la atención de
los mayores antes y ahora. La diferencia en los modos de vida.
CITAS:
[“…le dijo que no podía vivir
solo…”] [“…Necesitaba estar con gente alrededor, sentirse útil, compartir
momentos…”]. Pág.: 132.
“No es fácil eso de verte solo de pronto. Y tanto que no... Te despiertas
por la mañana y no hay nadie. Te acuestas por la noche, y sigue sin haber
nadie. Y algunos días te preguntas de qué coño sirve seguir currando como un
gilipollas”.
“¡Cuánto más fácil sería la vida si la gente se las apañase siempre sola!”
Vivimos sin conocer a nuestra
propia familia. “Era muy triste para Ferdinand darse cuenta solo entonces de
que su hijo no era tan idiota como pensaba. Y, para Roland, que su padre no era
un vejo estúpido”.